Titulares de prensa
Por: Gustavo Páez Escobar
La vitalidad humana se va reduciendo conforme transcurren las horas del día. Hay mayor lucidez por la mañana que al declinar la tarde. La noche es un paréntesis, un oasis de las fatigas cotidianas. Y el sueño repara y revitaliza. Es ideal una inyección de optimismo al comenzar el nuevo día. La naturaleza, por sí sola, anima el espíritu. Y si a esto se agrega una pequeña dosis de humor, o la concentración en un pensamiento agradable, o el cálido reencuentro con el hogar y la vida, la jornada se emprende con decisión y empeño.
El periódico es buen ingrediente para la salud mental. El buen artículo, o la noticia que gusta, o la caricatura picante, o el bikini que da calorías, y hasta el horóscopo de mentiras piadosas, reconfortan el ánimo. Todo perfecto, hasta que el mundo diáfano que nos envolvía parece distorsionarse con las tragedias de la humanidad. Hoy los titulares de prensa amanecieron fúnebres. Cojo al vuelo solo unos pocos:
Escuadrón de la muerte. Chocan dos avionetas’. Carro fantasma mata a esposa de piloto. Terrorismo postal en Bogotá. Sindicado de matar a catedrático. Eln asesinó a hacendado. Asesinados dos ancianos. Dramática explosión de gas. Se suicidó el escritor H. Montherlant. Localizan otro cadáver. Cruz de fuego, carretera de la muerte. El bus parecía una tea. Muerte bajo un tractor. Ahogados 155.000 pollitos…
Avanzo, retrocedo hojas. Pero todo inútil. El mundo está infestado de tragedia. Y hasta 155.000 pollitos sucumben por falta de concentrados. El optimismo se desmorona, no puedo evitarlo. Prefiero no pasar al otro periódico. Salto noticias, tratando de salvar este panorama desolado. Pero no tengo suerte, pues se unen involuntariamente dos renglones, como en ciertos dobles de cine:
Control sobre 5.000 prostitutas. Qué pena tan honda me da ser mujer. Esto último lo dice Juana de Ibarbourou.
La Patria, Manizales, 26-X-1972.